A muchos gatos les gusta salir al exterior: jardines, terrazas, balcones...

Después de un día de aventuras, vienen a sentarse en tu regazo y de repente sientes un bulto al acariciarlos. Miras más de cerca y ves una garrapata. ¡Oh no! ¿Sabes cómo eliminarla? En este artículo te contamos cómo detectar una garrapata en un gato, cuáles son los riesgos de tenerlas y qué es lo mejor que se puede hacer para eliminarlas.

Atención: este artículo contiene información general sobre las garrapatas, la prevención de las garrapatas y los peligros de las garrapatas en los gatos. Si tu gato tiene una garrapata, consulta Cómo quitar una garrapata de mi gato

Las garrapatas son parásitos pertenecientes a la familia de los arácnidos. Viven en plantas pequeñas, como arbustos, plantas semi-altas y pastos. Cuando encuentran un huésped, como un gato, le pican y le chupan sangre. Una garrapata normalmente mide unos pocos milímetros, pero cuando la garrapata hembra se llena de sangre, puede crecer hasta medir más de un centímetro. Crecen de esta manera por la elasticidad de la piel, lo que significa que pueden absorber hasta 100 veces su propio peso corporal. El motivo por el cual una garrapata hembra bebe tanta sangre es para poder poner huevos y reproducirse.

En la primavera, las garrapatas se activan, pueden atacar a tu gato y transmitirle enfermedades. Por lo tanto, revisa si tu gato tiene garrapatas desde la primavera hasta principios del invierno, ya que es la temporada en la que más abundan. Si tu gato sale a la calle con asiduidad durante ese periodo, lo mejor es que lo revises a diario.

Una vez que la garrapata está en el gato, busca un lugar cálido entre su pelo. Por lo general, se adhieren a las axilas, las ingles, el abdomen, las orejas y la cola de tu gato. También buscan las patas, los huecos entre las garras, el pecho o el cuello. En resumen; lo mejor es revisar a tu gato por completo.

Puedes comprobar si tu gato tiene garrapatas de la siguiente manera:

• Pasa los dedos sobre la piel de tu gato para ver si notas bultos.
• Asegúrate de no ver ningún insecto en su pelo.
• Revísalo a diario, ¡a la mayoría de los gatos les encanta que les toquen!
• Ten cuidado de no retirar una garrapata accidentalmente, puesto que es posible que no lo hagas de manera correcta y resulte perjudicial . 

Los gatos pasan mucho tiempo cuidando de su pelo y es habitual que atrapen garrapatas. Sin embargo, si encuentras una garrapata en tu gato, consulta nuestro artículo sobre Cómo quitar una garrapata de tu gato para retirarla a tiempo. 

Las garrapatas pueden estar infectadas con bacterias patógenas. Si pican a tu gato, estas bacterias podrían contagiarse y tu gato podría acabar enfermando.

Entre los daños que pueden causar se encuentran: enfermedades que pueden causar daño al corazón, al sistema nervioso, al riñón, a las glándulas suprarrenales y al hígado, e incluso pueden provocar la muerte.

Por desgracia, es imposible evitar por completo que tu gato tenga garrapatas.

Sin embargo, puedes tratar a tu gato con productos antiparasitarios específicos que las eliminen.

Nosotros te proponemos las pipetas, Beaphar FIPROtec® para gatos.

Beaphar FIPROtec®  elimina las pulgas y las garrapatas, convirtiéndose en la solución experta para el tratamiento y la prevención de las infestaciones en tu perro o gato. Se trata de un antiparasitario externo, de fácil aplicaciónl, que protege a tu gato contra las garrapatas durante 4 semanas. Simplemente se debe aplicar la pipeta sobre la piel, en el cuello de tu mascota y esta quedará protegida. 

Otra opción es Fiprotec Spray, que actúa contra pulgas, garrapatas y piojos. Es ideal para los gatitos, ya que se puede utilizar a partir de los 2 días de edad. Este spray se debe pulverizar por todo el cuerpo del animal y es efectivo de manera inmediata.